Desde el corazón de los Andes a la Tierra del Fuego,
sigamos los Andes con serendipia.
El Trans Sur América es nuestra reconciliación con la Aventura, ese amante imprevisible con el que acabamos separándonos tras un gran malentendido. Un viaje de aventura, en cuanto se contrata a través de un itinerario predefinido y que se sigue con su apartado de incluido y no incluido, mata lo inesperado, brutalmente. Hemos abusado de la aventura durante muchos años, la hemos traicionado. ¿Qué es hoy en día un viaje de aventura sino una promesa de servicios con precio cronológico y un reembolso si no se cumple esta promesa? La aventura, en cambio, es una promesa de lo inesperado, una promesa de que haremos todo lo posible para que nada ocurra como está previsto. Hay que organizarse y prepararse para lo inesperado, y es mejor ser un seguidor de la serendipia, el arte de encontrar lo que no se busca, de los encuentros fortuitos, de la feliz coincidencia. Vayamos en busca de la otra parte, del otro, en busca de nosotros mismos.
El Trans Sur América es una promesa de aventura,
es el arte de encontrar lo que no buscamos.
Nuestro trabajo será lidiar con lo incierto y los caprichos de todo tipo: humanos, meteorológicos, mecánicos. Geográficamente, es una larga travesía de América Latina, desde La Paz hasta Ushuaia. Un viaje es una historia que se cuenta a uno mismo, y éste se verá sacudido por los cambios climáticos, e impregnado de las historias de los personajes que han dado forma al continente. Desde Magallanes hasta el Che Guevara, estamos inventando nuestra gran epopeya y estaríamos encantados de hacer un trozo de camino, en el TranSurAmerica, en tu compañía si te apetece.
Saldremos de La Paz, Bolivia, en un 4x4 bordeando la Cordillera hacia el sur y unos 40 días después, celebraremos en Ushuaïa. Y como la línea de meta o la cima de una montaña es un callejón sin salida, volveremos al norte vía Argentina a nuestro punto de partida, La Paz. Estamos concienciados con el medio ambiente y somos cuidadosos con nuestra huella de carbono. Así es como desarrollamos el concepto de viaje de baja tecnología: sostenible, útil y accesible. Algunos lo llaman Slow travel, pero da igual, es nuestro concepto de viaje: Viajar con menos frecuencia, más tiempo, mejor. Los viajes deben dejar de ser un producto a consumir para convertirse en una experiencia a vivir.
Condiciones especiales y generales del Tran Sur América
El itinerario y las actividades se adaptarán al grupo y al clima. Viajaremos en un vehículo 4x4 bien equipado, con su propia caja de equipo de vivac. Habrá un guía/conductor por cada 4x4, responsable de sus 4 o 5 pasajeros. Las tareas y decisiones comunes son compartidas: montar el campamento, lavar los platos, hacer la compra... A veces dormiremos en campamentos de montaña, a veces en un albergue o en la casa de un habitante. Lo decidiremos juntos, entre nosotros, según el grupo. Sabemos a dónde vamos y hacia dónde vamos, el resto lo construiremos juntos, entre los miembros del equipo de la epopeya.
Puedes tomar y dejar el tranSurAmerica cuando quieras. Te apuntas por etapas y renuevas tantas veces como quieras. Nuestros compañeros de viaje evolucionarán según las etapas. Algunos se unirán a nosotros en el camino. La mayoría no hará todo el viaje, porque no todo el mundo tiene tiempo para hacer un viaje de 80 días.
Por el precio, cobramos el salario y los gastos del guía, la renta del 4x4, el combustible, el equipo de camping, la asistencia de Terra Andina, nuestro margen. El resto corre a cargo de los viajeros, en particular el hotel y la comida. Si hace los cálculos, comprenderá que el objetivo no es enriquecer a los propietarios de Terra Andina, sino experimentar un viaje extraordinario.
